De acuerdo con información de El Universal, el tratamiento a base de inyección de polímeros fue aplicado por Valentina de Albornoz. Este procedimiento llevó a la cantante al borde de la muerte y, además, la mantuvo bajo tratamiento durante al menos siete años, debido a que se le infectó la zona aplicada, así como la sangre y parte del hueso. Instagram
Este trago amargo para Alejandra Guzmán llevó a la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México a investigar a Valentina de Albornoz, por lo que se encontraron laboratorios clandestinos donde elaboraban los tratamientos estéticos bajo condiciones insalubres. Crédito: Getty Images
Durante la intervención sufrió un paro cardiorespiratorio, luego de estabilizarla y ser valorada, los médicos diagnosticaron que su cerebro había estado más de un minuto sin recibir oxígeno. Lo anterior derivó en duras consecuencias, como problemas psicomotores que le impiden moverse del todo. Crédito: Twitter
Damiana Villa, sobrina de la cantante, comentó en entrevista para el Diario Basta que Lucha también está perdiendo la voz. "Le cuesta mucho trabajo hablar, mis primas (las hijas de Lucha Villa) son las que dan entrevistas por ella, la cuidan mucho para que su voz no se siga afectando".
La actriz tuvo una fallida liposucción para la reducción de mamas, sin embargo, el pseudo doctor succionó varias partes de su cuerpo sin autorización durante 10 horas, lo cual le causó anemia en tercer grado. "Salí de ahí con anemia perniciosa y lo único que bajé fue como a 90 kilos; además, como pedí una reducción de mamas porque era talla 44 D y los hombros me sangraban por el peso que cargaban los tirantes del brassier, se me infectaron los senos", declaró Lucila a TVyNovelas. Mezcalent
En noviembre de 2016, Sabrina Sabrok tuvo riesgo de sufrir gangrena tras una intervención quirúrgica en los glúteos. Tres semanas después de la cirugía la argentina comenzó a sufrir dolores en el glúteo izquierdo, por lo que llamó a su cirujano quien al principio se escondió, pero terminó por drenarle la zona. Crédito: Mezcalent.com